lunes, 18 de febrero de 2013

Mira lo que has hecho



Quita mi foto de la pared
Si no cantara para ti
Porque todo lo que queda se ha ido
Y no hay nada allí para que puedas probar

Oh, mira lo que has hecho
Me has hecho un tonto de todo el mundo
Oh, bueno, parece divertido
Hasta que perdiste lo que habías ganado

Devuélveme mi punto de vista
Porque no puedo pensar por ti
Apenas puedo oírte decir
Qué debo hacer, así que elegí.

Oh, mira lo que has hecho
Usted ha hecho un tonto de todo el mundo
Oh, bueno, parece divertido
Hasta que perdiste lo que habías ganado

Oh, mira lo que has hecho
Me has hecho un tonto de todo el mundo
Un tonto de todo el mundo
Un tonto de todo el mundo

Quita mi foto de la pared
Si no cantara para ti
Porque todo lo que queda se ha ido
Y no hay nada allí para que puedas hacer

Oh, mira lo que has hecho
Me has hecho un tonto de todo el mundo
Oh, bueno, parece divertido
Hasta que perdiste lo que habías ganado

Oh, mira lo que has hecho
Me has hecho un tonto de todo el mundo
Un tonto de todo el mundo
Un tonto de todo el mundo

Nic Cester

lunes, 4 de febrero de 2013

Abstracto


Estuve horas pensando en que hablar, salieron muchas cosas de mi mente y pocas de mi boca, en un principio quiero hablar de lo abstracto, que es mucho, también es poco, es poco cuantificable o incalculable, no tiene dimensión y eso desconcierta y confunde. Lo abstracto me inundó y solo me deje llevar, es maravilloso y atormentador pudiendo, quizás, describirlo (mejor dicho, escribirlo)  en muchas páginas de placidez, pero la vida está hecha de cimientos, y los cimientos son concretos, hechos concretos de lo cual son base para nuestro crecimiento y búsqueda, esa búsqueda que nos conlleva a la felicidad, sino cual es el punto? Pienso (y actúo  que la felicidad es un conjunto de momentos placenteros delimitados por segundos, minutos, horas y días, con ápices de sonrisas, gestos, miradas, tacto y piel. Que concreto es!! , palpable y también incalculable. Separar lo abstracto de lo concreto es tarea de los humanos, sin dejar que ninguna nos invada, manejando las magnitudes de lo real e irreal.